miércoles, abril 22, 2009

Un hombre que hizo escuela


La profundidad de la huella que el fallecido músico Eduardo Pinto dejó en la comunidad artística mendocina aumenta con el tiempo. Tal vez por eso se siguen dando actos como el que hoy –el día en que su hija María cumple 1 año– realizará el CENS-3-482 (Libertad 820, Guaymallén), que empezará a llamarse Eduardo Alfredo Pinto en honor al bajista que murió en 2008 en un accidente automovilístico junto con el charanguista Valdo Delgado.

Este acto protocolar de “imposición de nombre” se llevará a cabo a las 18, en el cine teatro Recreo (Pedro Molina 110, Guaymallén). La entrada será gratuita y sujeta a la capacidad de la sala, en la que se completará el homenaje con la presentación del Eduardo Pinto Ensamble. “Va a ser un show de unos 40 minutos”, comentó el guitarrista Gustavo Bruno, quien estaba muy contento por el merecido reconocimiento que se ha logrado.

Bruno también contó que están “a punto de terminar la edición del disco solista de Eduardo”. “Ya está la parte técnica y la legal, así que en un mes tendremos el disco listo y organizaremos la presentación”, adelantó el músico sobre el CD, que se llamará Pinto.

“El valor de las cosas no está en el tiempo que duran, sino en la intensidad con que suceden. Por eso existen momentos inolvidables, cosas inexplicables y personas incomparables”, manifestaron los responsables en la invitación del evento. Palabras cuidadosamente elegidas que, de algún modo, explican el enorme cariño que rodeaba a este genio musical y la tristeza que produce lo mucho que se lo extraña.

Nota escrita por Ramiro Órtiz para Diario UNO.

Retratos del hombre y la tierra



Mañana quedarán inauguradas dos muestras de pintura y fotografía en dos importantes salas mendocinas. En una, el talentoso Víctor Villacorta mostrará su retrospectiva en La Caja de la Salud, mientras que Aldo Pacini y Guillermo Barón expondrán sus obras en las salas de arte de la Secretaría de Cultura.

La muestra de Villacorta quedará inaugurada mañana a las 21, en la sala ubicada en Peltier y San Martín de Ciudad. Se denomina Plática y está integrada por 25 obras de distintas series. El artista es un conocido dibujante y diagramador que se desempeñó en diversas agencias publicitarias y en importantes diarios de la provincia. Nació en Tucumán en 1938, pero a los 23 años se trasladó a Mendoza para estudiar arte. Así, egresó de la Academia Provincial de Bellas Artes y se radicó en nuestra provincia.

“Su obra ha sido expuesta pocas veces en nuestra provincia y el país. En su taller, ubicado en Los Corralitos, Guaymallén, posee más de mil trabajos, entre pinturas y dibujos realizados con Rotring, birome, tinta, pastel y óleo, así como grabados, bajorrelieves y esculturas en madera. Su pasión es pintar, modelar, crear... Más allá de las técnicas, que domina y combina hábilmente, cada obra es una manifestación de lo pequeños que somos frente al universo inconmensurable. ‘Ser o no ser en cada tela, papel, metal, madera o mármol, porque la naturaleza esta allí para ser punto de referencia del trabajo del artista’”, explica María Julia Godoy, curadora de la sala de La Caja de la Salud, donde la muestra estará habilitada hasta el 12 de mayo. Se puede visitar de lunes a viernes de 9 a 14.


Plasmar nuestro territorio
Por otro lado, en las salas Pablo Sacchero y Regional (España y Gutiérrez, Ciudad) quedarán expuestas, desde mañana a las 20, las obras de los plásticos mendocinos Aldo Pacini (pinturas) y Guillermo Barón (fotografías) y que se podrán ver hasta el 18 de mayo.

Pacini es un artista autodidacta que trata de captar la naturaleza en toda su complejidad y en su propia simplicidad. Sus obras son realizadas en territorio mendocino, tratando el color, la transparencia y profundidad, expresadas en los planos que se suceden en forma armoniosa y a la vez ingenua, del rico paisaje y la prodigiosa naturaleza de Mendoza.

Por su lado, Barón es un incansable buscador de imágenes que plasma al natural, sin ningún efecto de posproducción. Este artista compone el plano valiéndose de las propiedades de la luz con transparencias, destellos y sobre todo, de los reflejos de imágenes sobre superficies espejadas, donde el autor capta una poesía de singular belleza.

jueves, abril 09, 2009

Un francés con sangre menduca


El cantor popular Brian Chambouleyron visitará nuestra provincia para presentar su nueva placa, Tracción a sangre (ver abajo). El artista, nacido en Francia pero de padre mendocino, demuestra en sus discos que “tiene alma tanguera”, según su propia definición. Para los conciertos que ofrecerá en estas tierras el repertorio estará centrado en su última producción discográfica.

Desde una perspectiva contemporánea, Chambouleyron propone “una relectura del cancionero tanguero”, sobre la base de un personal estilo vocal y la interpretación de arreglos instrumentales originales.

“Tengo alma tanguera, pero me considero un cantor nacional. Lo que hago es una versión del tango. Busco canciones que no hayan sido muy transitadas y las versiono en algo más contemporáneo”, detalló el artista, quien además confesó que le gusta tocar para públicos reducidos porque de esa manera los conciertos “son más íntimos”.

La prolífica carrera de este singular músico se ha visto plasmada en discos como Chambouleyron le canta a Gardel, Recuerdos son recuerdos, Glorias porteñas, Voz y guitarra y Tracción a sangre.

“En los últimos años fui incorporando un repertorio personal de canciones tradicionales rioplatenses que solía tocar en la intimidad y en público con mi guitarra. Piezas que descubría por casualidad me enamoraban a primera escucha. Recuerdo que podía pasar hasta meses dedicado a una sola de ellas, y hasta una noche resolviendo un compás”, comentó el artista franco-argentino al trazar algunas consideraciones estéticas de su trabajo.

Un cocktail de nacionalidades
Chambouleyron es hijo de un mendocino que se crió en Corralitos, pero él nació en Francia, donde vivió hasta los 5 años. Luego regresó al país y en la época del proceso sus padres se exiliaron a México y también a Brasil.

“Siempre me sentí argentino. Aunque un argentino ‘lavado’ o influenciado por los otros lugares donde viví. A veces en mis recitales suelo interpretar temas en otro idioma, pero siempre ‘acriollándolos’. Me considero un juglar criollo. Además, soy medio mendocino. Mi papá era de Mendoza y cuando era chico las vacaciones siempre las pasaba en la provincia, así que estoy feliz de volver”, remató Chambouleyron.
Los conciertos


  • Hoy, a las 21.30, Chambouleyron se presentará en el teatro Quintanilla (subsuelo plaza Independencia, Ciudad). Entrada $25.
  • El sábado, a las 12.30, estará en forma gratuita en la pérgola de la peatonal Sarmiento, Ciudad. Mientras que a las 21.30 dará un show en Casa Usher (paseo Alameda 2259, Ciudad).
  • El domingo, a las 21.30, cerrará su gira por Mendoza en Tajamar (paseo Alameda 1921, Ciudad).

martes, abril 07, 2009

Villavicencio fue el escenario de la Misa Criolla


El domingo 5, Villavicencio trajo el Festival Internacional de Música Clásica por los Caminos del Vino a las terrazas y jardines del Hotel Villavicencio, y con ello acercó a la comunidad mendocina la oportunidad de disfrutar de un espectáculo de nivel internacional, de manera libre y gratuita, en un paisaje único como lo es la Reserva.

La Misa Criolla resonó en este imponente escenario donde la belleza natural del entorno enmarcó una de las veladas más importantes del Festival Internacional Música Clásica, que fue interpretada por el Coro de Niños Cantores de Mendoza, el Ensamble Vocal Mendoza, el tenor Fernando Ballesteros y el barítono Diego Martín.

Traer este gran atractivo cultural a Las Heras representó una meta cumplida para Villavicencio, ya que significó acercar a todos los mendocinos y turistas a uno de los conciertos más grandes de este ciclo.

A esta actividad cultural se le sumaron dos actividades educativas durante el domingo de ramos para brindar a la familia la posibilidad de recorrer y conocer las riquezas que encierra la Reserva.

Por un lado, en el centro de interpretación, el equipo de guardaparques brindó educación a los visitantes sobre las riquezas naturales, históricas y arqueológicas que se preservan en la Reserva.

Asimismo, se montó una carpa en la cual se dio información sobre el plan educativo de Villavicencio “Cultura del Agua”, orientado a generar conciencia sobre la importancia del agua como recurso vital para el ser humano y escaso.

De este modo, el agua insignia y orgullo de los mendocinos continúa afirmando su compromiso con la comunidad, tras desarrollar actividades libres y gratuitas para todo público, sin descuidar la preservación de los recursos naturales y la concientización acerca de ellos.